By Olivia Liendo – Univision | August 24, 2016

El deterioro de su capacidad mental y perder su independencia es lo que más les inquieta a los hispanos. También temen dejarle deudas a sus familias.

Estos son los resultados de una encuesta que este miércoles publicó la Associated Press y el Norc Center for Public Affair Research de la Universidad de Chicago, llamada “Cuidado a largo plazo en Estados Unidos: Cómo los hispanos esperan envejecer”.

“De los ocho factores sobre la vejez contemplados en la encuesta, los estadounidenses hispanos y no hispanos revelaron niveles similares de preocupación. Una excepción es la preocupación por dejar deudas a la familia. Cuatro de cada diez hispanos están bastante preocupados por que eso ocurra, en comparación con tres de cada diez estadounidenses en general”, comentó la doctora Jennifer Benz, directora de la investigación.

El estudio, financiado por The SCAN Foundation, fue realizado este año e incluyó entrevistas en inglés y español a 1,698 estadounidenses mayores de 40 años en 50 estados, incluyendo una muestra representativa de 400 hispanos.

Los hispanos más jóvenes tienden a preocuparse más qué ocurrirá con ellos en la vejez. Según la encuesta, los hispanos de 40-54 años expresan mayor preocupación que los de 65 años en dejar deudas a sus familiares, también en ser una carga para su familia, tener que salir de su casa y trasladarse a un hogar de ancianos, en el pago por la atención que puedan necesitar a medida que aumentan de edad y están más preocupados por salir de sus deudas.

“Hemos visto este resultado consistentemente cuando se trata de la preocupación por los cuidados a largo plazo, así como otras cuestiones relativas a la vejez como la jubilación. Una teoría es que a medida que la gente llega a esa etapa de su vida, han hecho la transición de preocuparse a tratar de vivirla”, señaló Benz.

Aunque este estudio sobre la atención a largo plazo no cubre el tema del retiro, los investigadores saben que respecto a los ingresos y la seguridad financiera, en todos los grupos raciales y étnicos los estadounidenses de menos ingresos se preocupan mucho más por el retiro, al igual que aquellos que tienen deudas personales o están retrasados en el pago de las facturas.

El gran desafío es que el cuidado a largo plazo es caro. Sin una forma de pagar por ello, como el seguro de cuidado a largo plazo, se pueden gastar en poco tiempo los ahorros de la jubilación.

Los niveles de preocupación por casi todos estos problemas han disminuido desde 2015. Benz comentó que no se puede deducir la razón solo por la encuesta, pero que en muchos de los estudios del Norc Center for Public Affair Research han visto un incremento en el nivel de optimismo de los encuestados.

“Las causas probables son la estabilización de la economía y tal vez el aumento en el acceso a la cobertura de salud. Estas teorías son puestas en evidencia por el alto número de hispanos estadounidenses (y en general) que piensan que van a poder depender de la Seguridad Social y Medicare cuando necesiten de cuidados a largo plazo, aunque ninguno cubra adecuadamente esas necesidades”, añadió Benz.